El cáncer, caracterizado por una proliferación celular descontrolada, representa una de las principales causas de mortalidad global debido, en parte, a la carencia de herramientas eficaces para la detección temprana. En este contexto, los microARNs (miARNs) han sido objeto de numerosos estudios, ya que desempeñan un papel crucial en la regulación génica y, específicamente, en el cáncer. Algunos miARNs actúan como oncogenes o supresores de tumores, y su expresión aberrante está vinculada al desarrollo de la enfermedad.
La biogénesis de los miARNs comienza con la transcripción de los genes miARN por la RNA polimerasa II. Los transcritos primarios (pri-miARN) se procesan en el núcleo por la enzima Drosha, generando pre-miARN, que se transportan al citoplasma y se procesan nuevamente por Dicer, dando lugar a los miARN maduros. Estos miARN maduros se incorporan al complejo RISC (RNA-induced silencing complex), que guía su interacción con los ARN mensajeros específicos, regulando negativamente su expresión génica.
La importancia de los miARNs se extiende a la regulación de procesos biológicos clave, como el desarrollo celular, la diferenciación, la apoptosis y el metabolismo, incluido su papel en diversas enfermedades, especialmente el cáncer. Además, los miARNs también se encuentran en fluidos corporales, como la sangre, y su estabilidad se atribuye a su envasado en microvesículas o su asociación con lipoproteínas, lo que sugiere su potencial papel en la comunicación celular.
Los miARNs circulantes, al ser detectados en la sangre, representan una prometedora clase de biomarcadores no invasivos para el diagnóstico, pronóstico y evaluación terapéutica del cáncer. Su recogida no invasiva, estabilidad en suero y plasma, y su asociación específica con ciertos tejidos respaldan su utilidad potencial como indicadores tempranos de cambios neoplásicos. Su expresión desregulada ha sido asociada con el cáncer, y su perfil en sangre parece ser específico de tejido.
En resumen, los miARNs, gracias a su papel en la regulación génica y su presencia en fluidos corporales, representan una prometedora herramienta para la detección temprana y el diagnóstico del cáncer, ofreciendo un enfoque no invasivo y específico para diferentes tipos de tumores.
https://www.um.es/eubacteria/MicroRNAs_circulantes_biomarcadores_cancer.pdf